DASEIN

 

¡Y cómo no mirar al espejo!

Roto…

¿Sabías que está lleno el rellano de esos

pequeños granos de arena

que componen tu rostro?

 

Reflejo…

 

Es ese espejo el muro de Auster

y en los fragmentos

y en las hendijas se reconoce

la eternidad del recuerdo.

 

Lo insondable…

 

La caída, el resquebrajamiento

de cada pedazo roto, roto, deshecho

tan sólo es el preludio

del rastro de arena en las manos…

Deshaciéndose…

 

La brisa pasa y se lleva lo hecho

Fragilidad…

Siguen las grandes preguntas por el ser y el estar

Existencia…

 

Y de ellas sólo queda

un rastro de arena en la nieve,

en la playa, en el sol

Piedra arrojada…

 

Memoria.

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